8 de marzo y declaraciones políticas. No se lo pierdan

¿A que suenan esos discursos?

Mas bla, bla, bla.. en boca de políticOs.
Para simular: «actos de sensibilización», «compromiso», «declaraciones», «conmemoraciones». ¡Jua, jua, jua!
A la caza del voto preelectoral. No olvidemos que las mujeres representamos el 50% del censo. ¡Pánico! es lo que les da.

La FEMP llama a los Ayuntamientos al compromiso con la igualdad de género

La FEMP ha hecho un llamamiento a los Gobiernos Locales a sumarse a la conmemoración del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, mediante actos de sensibilización y aprobación de declaraciones en las que se refleje el compromiso local con las políticas de igualdad de género.

Ninguneadas

“En Palencia ni una sola mujer encabeza lista al Ayuntamiento (capital), a la Diputación ni a las Cortes regionales. La mitad de la población palentina, la femenina, no existe, no vale, no tiene capacidad, somos mujeres”

Llegó Zapatero con su peculiar entusiasmo feminista y todas, digo todas, nos lo creímos con la misma ingenuidad que los cuentos infantiles que nos contaban de pequeñas, con su Vicepresidenta de armas tomar, su Ministra de Defensa y una tímida pero activa Ministra de Igualdad, entre otras varias valiosas mujeres. Pero la alegría dura poco en casa del pobre, menos aún si la pobre es mujer. Al segundo bote solo la de Defensa y una Ministra de Hacienda nos honran con su presencia y sostienen a medias aquél entusiasmo primero que tanto sorprendió a españoles y extranjeros.

Bien vendido y útil, desde luego, el logro de las políticas contra la Violencia de Género, el divorcio exprés, la Dependencia, el matrimonio homosexual y la libertad de la maternidad, pero con la crisis las aguas han vuelto a su viejo cauce, la imagen de la mujer valiosa ha desaparecido, de las cuotas ni se habla, en la prensa han dejado de aparecer mujeres en los órganos de decisión públicos y privados. La foto de los poderosos empresarios reunidos para “elaborar” ideas contra la crisis en cuya eclosión ellos mismos han sido los partícipes más activos, hacen que se nos caigan las lágrimas. Las candidaturas que se van pregonando para los nuevos comicios provocan lástima, el número uno de cada lista es un hombre, detrás lo que venga para cubrir el expediente del “qué dirán”, desde viejas glorias con peana de plomo, pasando por “amigas” con derecho o no a roce, hasta sumisas afiliadas dispuestas a barruntar discursos rayanos en el ridículo más atroz. En eso se han convertido las promesas varoniles. ¡Hay incautas! ¿Por qué unos iban a ser diferentes de los otros si lo que tienen en común es siempre lo mismo y donde se ubica su orgullo?

En política las mujeres no estamos representadas, debiéramos iniciar nuevas movilizaciones, llamar la atención sobre la capa invisible que nos va cubriendo las conquistas que habíamos creído obtener y que no consolidaron, debiéramos hacer huelga de mujeres, abstenernos de votar todas las listas de candidatos que no encabecen mujeres hasta que el número de estas sea igual. En Palencia ni una sola mujer encabeza lista al Ayuntamiento (capital), a la Diputación ni a las Cortes regionales. La mitad de la población palentina, la femenina, no existe, no vale, no tiene capacidad a los ojos de los partidos que seleccionan los candidatos, porque los que gorjean sobre remedios a la despoblación tienen a sus esposas lavándoles y planchándoles las camisas que lucirán en los mítines de autobombo. Sus propias esclavas silenciosas, discretas y sumisas son el modelo de mujer que conocen y quieren. Las jóvenes que buscan independencia, libertad, autonomía y ser personas, huyen despavoridas de este entorno decimonónico patriarcal y meapilas que lleva siglos pregonando en falsedad lo que a buen seguro saben que no van a cumplir ni por asomo. «Periódico CARRIÓN, 1ª quincena marzo 2011»

Ninguneadas

“En Palencia ni una sola mujer encabeza lista al Ayuntamiento (capital), a la Diputación ni a las Cortes regionales. La mitad de la población palentina, la femenina, no existe, no vale, no tiene capacidad, somos mujeres”

Llegó Zapatero con su peculiar entusiasmo feminista y todas, digo todas, nos lo creímos con la misma ingenuidad que los cuentos infantiles que nos contaban de pequeñas, con su Vicepresidenta de armas tomar, su Ministra de Defensa y una tímida pero activa Ministra de Igualdad, entre otras varias valiosas mujeres. Pero la alegría dura poco en casa del pobre, menos aún si la pobre es mujer. Al segundo bote solo la de Defensa y una Ministra de Hacienda nos honran con su presencia y sostienen a medias aquél entusiasmo primero que tanto sorprendió a españoles y extranjeros.

Bien vendido y útil, desde luego, el logro de las políticas contra la Violencia de Género, el divorcio exprés, la Dependencia, el matrimonio homosexual y la libertad de la maternidad, pero con la crisis las aguas han vuelto a su viejo cauce, la imagen de la mujer valiosa ha desaparecido, de las cuotas ni se habla, en la prensa han dejado de aparecer mujeres en los órganos de decisión públicos y privados. La foto de los poderosos empresarios reunidos para “elaborar” ideas contra la crisis en cuya eclosión ellos mismos han sido los partícipes más activos, hacen que se nos caigan las lágrimas. Las candidaturas que se van pregonando para los nuevos comicios provocan lástima, el número uno de cada lista es un hombre, detrás lo que venga para cubrir el expediente del “qué dirán”, desde viejas glorias con peana de plomo, pasando por “amigas” con derecho o no a roce, hasta sumisas afiliadas dispuestas a barruntar discursos rayanos en el ridículo más atroz. En eso se han convertido las promesas varoniles. ¡Hay incautas! ¿Por qué unos iban a ser diferentes de los otros si lo que tienen en común es siempre lo mismo y donde se ubica su orgullo?

En política las mujeres no estamos representadas, debiéramos iniciar nuevas movilizaciones, llamar la atención sobre la capa invisible que nos va cubriendo las conquistas que habíamos creído obtener y que no consolidaron, debiéramos hacer huelga de mujeres, abstenernos de votar todas las listas de candidatos que no encabecen mujeres hasta que el número de estas sea igual. En Palencia ni una sola mujer encabeza lista al Ayuntamiento (capital), a la Diputación ni a las Cortes regionales. La mitad de la población palentina, la femenina, no existe, no vale, no tiene capacidad a los ojos de los partidos que seleccionan los candidatos, porque los que gorjean sobre remedios a la despoblación tienen a sus esposas lavándoles y planchándoles las camisas que lucirán en los mítines de autobombo. Sus propias esclavas silenciosas, discretas y sumisas son el modelo de mujer que conocen y quieren. Las jóvenes que buscan independencia, libertad, autonomía y ser personas, huyen despavoridas de este entorno decimonónico patriarcal y meapilas que lleva siglos pregonando en falsedad lo que a buen seguro saben que no van a cumplir ni por asomo. «Periódico CARRIÓN, 1ª quincena marzo 2011»

Cadáveres políticos

En esta pequeña ciudad, que aún sin querer nos vemos y soportamos, es fácil interpretar o inventar las situaciones. El alegre rostro de D. Carlos Fernández Carriedo de haberse librado una vez más, de medir sus fuerzas con el incombustible D. Helidoro Gallego al surgir un espontáneo entusiasta de tal cometido, lo dice todo.

Tampoco Dña. Ángeles Armisén puede ocultar tras su amplia sonrisa, que si no va para Presidenta de la Diputación, otra cosa habrá que mejore su situación.

Y hablando de la Diputación, Palencia es tan pequeña que todo el mundo sabe que entre el Presidente y el Vicepresidente no hay conversación desde hace meses, hasta el punto de que el primero le ha quitado a su segundo de abordo, por decreto ipso facto, las facultades de contratación “ a capricho” de los importes menores entre los que se enmarca precisamente la publicidad en medios de comunicación, porque dicen, dicen… que si andaba exigiendo salir en la foto de frente y sacar al presidente de perfil e incluso omitirlo, y éste, advertido, ha recuperado para sí tales controles. Ilusos hay por todos lados porque en cualquier caso entre la fielatura del PP palentino ninguno goza de simpatías.

Es momento de mirar los rostros y rictus de los actuales, los presuntos, los aspirantes y los desahuciados. Es el momento de la quiniela de los elegidos y de los que pronto engrosarán esa triste “santa compaña” de cadáveres políticos y almas en pena que ya andan buscando acomodo secundario o subsidiario y rutilarán un tiempo más en torno de los astros a ver si entre las viejas relaciones encuentran un puestito digno para seguir manteniendo un poquito de algo, por aquello de que “Quién tuvo, retuvo” y no marcharse a casa con una mano adelante y otra atrás.

Y así comienza la carrera para la confección de las candidaturas electorales a los comicios municipales y algunos autonómicos. Para los cargos retribuidos económicamente e investidos de poder y “prestigio”, quién no haya hecho carrera interna dentro del partido y tenga su “corralito” formado, ya no llega a tiempo, ahora solo queda fortalecer el puesto de salida y blindar bien el curriculum con ornamentos rimbombantes.

Es la cara negra de la democracia que nos toca vivir. A los ciudadanos electores nos dan las listas enlatadas. No hay nada perfecto, pero los partidos debieran plantearse su proceder interno, auditarse con seriedad, para evitar practicar con denuedo aquello que critican sacrificando la buena voluntad y la fe creyente de sus afiliados y adeptos en aras de intereses más espurios que eficientes y eficaces.

Pero… esto es lo que hay, primero se sirve la mesa principal y después come la tropa, al rancio estilo estalinista o eclesial, pero con la “infalibilidad” de sus líderes disfrazada de tintes y “procedimientos democráticos”. «Diario Palentino, 16 de enero de 2011»

En la tensión – Diario Palentino Digital

En el otro lado de la tensión interna intrapartidos está siempre el debate sobre si el candidato principal o secretario general o presidente, tiene derecho y hasta donde de elegir a quienes, en su caso le acompañarán en el equipo de gobierno o de oposición, porque a fin de cuentas a quien van a partir la cara es a él, que deberá responder políticamente por todos los de su comparsa.

En la tensión

Comprar bien, a pesar de las apariencias, es para entendidos. Pero… ¿Quién es mejor vendedor? ¿El que oferta a la vista un atractivo escaparate con productos de mediana o baja calidad o el que ofrece muy buen género pero descuida su presentación?
Los expertos en mercado aseguran que se vende mejor una mierda bien envuelta que oro molido en un saquete indecente, de ahí que haya embalajes más costosos que el contenido que esconden.
Es lo que sucede en el seno de los partidos políticos cuando se empiezan a mover los aparatos para presentar candidatos que ganen elecciones. Hay que fabricar las figuras que los electores esperan, que el mercado demanda, como en Operación Triunfo, rostros sonrientes contra viento y marea, curriculum meticulosamente preparados en aumentativo, una buena presentación, mejores padrinos y generosa campaña. Pero cada vez más la eficacia, eficiencia, méritos y capacidades de optimizada gestión y buen gobierno de otros aspirantes quedan circunscritos a una premeditada presentación en saquete indecente cuyo aspecto externo frene el deseo de conocer para no oscurecer el lustro artificioso de la figura principal. En el cuerpo de afiliados siempre hay obedientes corredores que van implantando soto vocce, poco a poco pero en erosión constante, los créditos y descréditos de cada uno que intente descollar. Nada sucede por casualidad.

Los ciudadanos del bienestar estamos acostumbrados a que nos vendan de todo, somos adquirentes compulsivos e irreflexivos, no miramos a fondo lo que nos llevamos, nos vale que nos guste el spot publicitario porque nos van cociendo el cerebro poco a poco a medida que calientan el agua de un presunto baño relajante (“spa”) que nos ofrecieron al comienzo de la función. Somos votantes ciegos porque las siglas nos arrastran o somos volubles ciudadanos que llevados por las conversaciones de esquina nos enrabietamos con lo que se cuenta que les está pasando a desconocidos con esta crisis.
En el otro lado de la tensión interna intrapartidos está siempre el debate sobre si el candidato principal o secretario general o presidente, tiene derecho y hasta donde de elegir a quienes, en su caso le acompañarán en el equipo de gobierno o de oposición, porque a fin de cuentas a quien van a partir la cara es a él, que deberá responder políticamente por todos los de su comparsa.

Comenzamos ya las precampañas, las ofertas, las sonrisas de oreja a oreja, las contradicciones y las ceremonias de confusión. Pero los ciudadanos-electores tenemos una responsabilidad, la de mirar que hay debajo de cada envoltorio. Y si no luego no nos quejemos de lo que nos dan.

En la tensión – Diario Palentino Digital. 15 de agosto de 2010