Alegrón para los violentos

maltrato“Rusia permite pegar a la mujer, a los hijos y a los padres, una vez al año y por un módico precio”

            Desde las instancias civilizadas la noticia nos ha llegado como un proyectil a la línea de flotación de las democracias del siglo XXI. Más espeluznante es aún, si consideramos que la propuesta la defiende nada menos que una mujer, parlamentaria del partido ultra conservador con el apoyo incondicional, como no podía ser de otra manera, de la Iglesia Ortodoxa. Hasta el mismo Putin se opone al mal trago de semejante vergüenza internacional. Con unas estadísticas formales que exhibe el propio gobierno ruso, 36.000 mujeres agredidas por sus parejas cada año y otros 26.000 niños por sus padres, los ultraconservadores consiguen descriminalizar la violencia doméstica y que vuelva a ser una cuestión interna de las familias, a lo sumo sancionable administrativamente con multas, porque así lo requiere la “tradición de la autoridad parental” y no quieren que haya encarcelados «por dar una torta» durante una discusión porque eso iría “contra la familia”. Se vuelve a legitimar la brutalidad en el seno familiar. En Rusia una mujer muere cada cuarenta minutos a manos de algún hombre de su entorno familiar. En el mismo saco, también se descriminalizan los bofetones a los padres y a los hijos del violento que goza de autoridad sobre todos ellos.

            Ahora que en el Islam comienzan a entrar en razón, y Marruecos prohíbe en el país el uso del burka, en Rusia marchan hacia atrás y esto es el cuento de nunca acabar. ¿Por qué esa inquina contra las mujeres, creadoras de vida?, O, acaso por eso, dar vida es demasiado divino para que muchos hombres animalizados en machos lo puedan soportar. Cada día que una noticia de este calibre o de una asesinada por el terrorismo machista salta a la luz, me acuerdo de nuestro ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero, todo mérito que le podamos reconocer las mujeres será poco. Sacó de las sombras a las maltratadas y a los maltratadores y los puso en el mapa de la conciencia social y de las políticas preventivas y sancionadoras. Lástima que su permanencia en el gobierno durara tan poco y que detrás llegara el conservadorísimo Mariano Rajoy, quién en lo que lleva de mandato ha recortado un 21,6% los fondos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad para la prevención de la violencia machista. Abrupto camino el de la igualdad, un paso adelante, cien atrás. 

«Diario Palentino, 15/01/2017»