“Siglo XXI, becas de investigación para investigadores españoles, solo varones”
Así como suena. Adela Muñoz, catedrática de Química Inorgánica en la Universidad de Sevilla, desenmascara el trato que una institución privada, pero con pasaporte diplomático español, denominada Real Colegio de España en Bolonia (Italia), oferta becas 2017-2018 para jóvenes investigadores españoles, pero ojo, solo varones, Hemos dicho 2017. Sí. Aquí y ahora. Ayer se celebró el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, otra fecha más para inducirnos a tomar conciencia sobre el fundamental papel de las mujeres en el desarrollo de las sociedades, papel minimizado y trastocado en la historia redactada por la infracultura patriarcal, como se deduce de la alarmante encuesta europea encargada por L’Oreal, donde se asegura que el 63% de los españoles cree que las mujeres no sirven para ser científicas de alto nivel. Además solo reciben el 18% de los premios de ciencia en nuestro país.
Adela Muñoz, presenta su libro “Sabias”, para resaltar el importante papel de las mujeres en la ciencia y para explicar con cifras oficiales como existiendo similar número de doctorados en ambos sexos, el perfil destacado de las mujeres se va desdibujando a medida que se asciende en los niveles superiores de presencia y de poder en los organismos e instituciones de la investigación. Así lo confirma el informe ‘Científicas en Cifras 2015’, con una sola rectora de universidad, un 79% de catedráticos de ciencia hombres y ninguna directora general en organismos de investigación. La historia de las científicas ha sido directamente borrada o sus éxitos arrebatados. Incluso en algunos círculos se intenta expoliar a Marie Curie de sus descubrimientos poniendo por delante el nombre del esposo, mero colaborador, o diluyéndola bajo el nombre colectivo de esposos Curie. En los últimos tiempos van saliendo a la luz nombres de insignes cinetíficas desconocidas hasta ahora, como el de Ada Lovelace, matemática y escritora que a mediados del siglo XIX trabajo sobre la calculadora analítica introduciendo el primer algoritmo capaz de ser procesado por una máquina, es decir la primera programadora de ordenadores.
Y, vuelve al tapete el tema de la maternidad que coincide en las mujeres con la etapa de mayor dedicación y posibilidad de crecimiento profesional. En un medio de dominancia patriarcal, la creatividad y potenciales de las mujeres se ven aplacados en perjuicio de la propia sociedad que se beneficiaría de sus aportaciones. Un estudio de la Escuela de Negocios de Harvard concluye que las hijas cuyas madres trabajan fuera de casa tienen más éxito laboral y sus hijos son más atentos.
«Diario Palentino, 12/02/2017»