Las manos quemadas del PP

0F1F-275D-TercerGobiernoVII20022“El PP ha puesto a prueba la capacidad de tolerancia de los españoles”

                Y no se cortan un pelo. Las cabezas más visibles ruedan como pelotas por todos los estamentos judiciales. Cada semana, uno de los bichos grandes del Partido Popular es encausado, investigado, imputado, procesado o encarcelado. Una buena parte de los recursos judiciales están dedicados en exclusiva para ellos, además de la Agencia Tributaria, la policía especializada en delitos económicos y fiscales, y el Tribunal de Cuentas. Once de los catorce ministros que fueron del gobierno de Aznar andan en alguno de los peldaños judiciales, incluido el propio Rajoy.

            Montoro se parte de risa en nuestras narices. La campanita de Bankia suena a cencerro amenazante de ruina para todos los españoles. Rato anda por ahí suelto yendo y viniendo a Suiza -no a comprar queso-, gracias a que la Fiscalía Anticorrupción no pudo encontrar causa para investigarlo y ha tenido que ser la Agencia Tributaria y un tribunal ordinario quienes han actuado, claro que dicha Fiscalía tampoco encontró motivo para mantener encarcelado al insigne Blesa. Cómo sufrirá la inmensa mayoría de honestos jueces que leen, directamente o entre líneas, lo que está pasando por las alturas político-judiciales.

            Y es que en el PP, los voceros no se cortan de poner la mano en fuego por cada compinche que sale a palestra judicial. Cospedal, Floriano, Aznar, y hasta el mismísimo Rajoy, todos las tienen hoy bien chamuscaditas a la plancha. Más, no les importa. Con el mismo cuajo que defendieron a los presuntos ignoran hoy a los delincuentes. Vaya familia, como para fiarse. Ahora son, -ese señor- que al parecer ha dejado de ser un –ser humano normal- para convertirse en apestado inmundo. Los imagino rompiendo a trochemoche fotos de besamanos, de esas que se colocan en los despachos para que el visitante vea cómo se las gastan, la altura de amistades con las que se codean, vamos, igual que el Pequeño Nicolás.

            En el PP no hay un garbanzo negro, es el cocido entero el que está quemado, no hay piso en Génova sin contaminar, hasta con obras pagadas sin IVA. Los hechos de sus dirigentes nos demuestran sus verdaderas intenciones, nada que ver con sus promesas. Y para que no protestemos nos aplican la Ley Mordaza. Todo un lujo de gobierno, todo un lujo de partido. Esta debe ser la Marca España que ofrecieron, estar en la prensa internacional señalados con el dedo de la corrupción.

«Diario Palentino, 19 de abril de 2015»

Sol y nervios. Primavera y elecciones

rajoy_bigotesQue retorne el sol para las libertades ciudadanas

             Sale el sol y atacan los nervios a los políticos. No queda nadie en los despachos; alcaldes, concejales y otras hierbas de la especie política brujulean de cofradías a inauguraciones buscando la foto definitiva que les hará ganar las elecciones. Cada entrevista  se prepara con esmero y un equipo de asesores que alientan al púgil, le dan palmaditas de ánimo -tú eres grande-, antes de salir a las ondas que llevarán sus palabras hasta los presuntos electores. Qué pasará. Hay que trabajar duro, prometer y prometer, ya lo dijo D. Adolfo, -Puedo prometer y prometo-, aunque él tal vez podía, otros prometen sabiendo que no pueden ni deben. Es en lo que ha derivado nuestra ajada democracia.

            Anonadados quedamos los españoles ante la comunicación concisa y veraz del funcionario francés explicando la causa suicida de la tragedia aérea. Menuda suerte, unas gotas de ilusión nos inundan, hay otros mundos posibles en los que las autoridades no mienten a sus ciudadanos porque les respetan, les contestan, no tienen prisa en cerrar la carpeta y levantar la sesión de aclaraciones en la rueda de prensa. Aleluya. Si otros lo pueden disfrutar nosotros también, es cuestión de remangarse y decidir adecuadamente.

            Sin pérdida de tiempo y ante los pronósticos del trompazo electoral, el todopoderoso Partido Popular acaba de aprobar la Ley Mordaza que pone fin a una era histórica de libertades ciudadanas estrenadas al salir de la macabra dictadura; aprueba un nuevo Código Penal que retoma la cadena perpetua condenada por los derechos humanos. Pocos días antes, el ministro Wert expulsa a los estudiantes de las aulas universitarias con su receta de tres cursos caros más dos cursos carísimos e inaccesibles para los jóvenes españoles maltratados por la crisis. De la corrupción interna, esta vez, ni hablamos.

            Está claro que los candidatos de los partidos aspirantes estén de los nervios, lo que no se entiende es que lo estén en el PP, dónde a poco autoanálisis que hagan deberían tener claro que su destino final es el descalabro local como previo al nacional, o llegar a la conclusión no menos alarmante de que están gobernando una panda de borregos. La deriva arrastrará alcaldes de pequeños municipios que pertenecen a una estirpe política distinta donde las satisfacciones son escasas. Como siempre pagarán justos por pecadores. Amén.

«Diario Palentino, 29/03/2015»

Lo que pidamos se nos dará

17D_recortes_UGT1-300x199“Ningún partido nos dará lo que nos ha quitado cuando ha tenido ocasión”

      En la política de los últimos años retumban en nuestros oídos las monsergas repetitivas de viejas voces, o de caras nuevas con los mismos eslóganes que ya no ilusionan a nadie. La forofez incondicional no se mantiene después de tantos desencantos y tantas traiciones. Qué los ciudadanos somos responsables de las consecuencias de nuestro voto, nadie lo duda. Entretenidos que andamos entre el fútbol, las telenovelas y los grandes hermanos se nos echa encima el tiempo de otorgar poderes sobre nuestros destinos y lo hacemos a lo loco, como un trámite más, lo que quieras y después comemos.

     Estar al día de las noticias es de locura, nos acaban atrapando el inconsciente y nos ponen de mal
humor. Mucho mejor conformarnos con insultar al árbitro que pitó erráticamente, al guionista que escribió un final que nos disgusta, al juez que falló en contra de los nuestros. Nos damos un momento de ira espontánea y volvemos a los quehaceres para después echarnos en brazos de los insulsos entretenimientos que nos sirven en bandeja con solo apretar un botón. Pensar duele, ya lo creo, requiere sentarse y analizar, no estamos hechos para elaborar pensamientos propios, mejor seguir bien integrados en el rebaño y que decida el pastor. Acaso somos ingenuos, y como incautos creemos lo que nos cuentan en campañas plagadas de promesas cuyo cumplimiento olvidamos exigir, y dale al botón otra vez. Hay que ver, mi reino por un plato de lentejas

     Pero, cuidado, suenan voces en la Derecha, como la de la periodista Isabel San Sebastián, que lamenta el “dineral” que cuesta que los ciudadanos acudan a votar, y califica los múltiples comicios de 2015 como un costoso “guateque” que paraliza el país. El comentario es terrorífico, espeluznante, nos lleva, como es propio de la derecha, a eliminar todo aquello que no sea crematísticamente rentable de inmediato en los balances contables. Traducido, ni la educación ni la sanidad públicas, ni el subsidio de desempleo, ni la protección a las familias, ni las becas universitarias, ni los derechos de los trabajadores, ni la justicia, ni…, ni…, ni…, nada que huela a Estado social y democrático de Derecho es rentable económica y contablemente para una ideología que busca retornar a la cuasiesclavitud como sistema de organización social.  Mejor pensar antes de votar, el futuro está cerca y en nuestras manos.

«Diario Palentino, 22 de marzo de 2015»

El PP, acorralado

corrupcionPP_thumb[2]“Desbandada de votantes a Ciudadanos y a Podemos. Los jóvenes ni están ni se les espera”

             A pesar de las sólidas convicciones de la derecha española, el cambio revolucionario que vivimos y la pésima gestión de gobierno llevan al PP a hacer aguas por todos sus flancos. Las encuestas oficiales y oficiosas le empujan a la deriva, sus portavoces endurecen el discurso en un intento desesperado de sacar la cabeza, respirar, agarrarse a lo que puedan y atacar antes de volver a hundirse en el torrente que les arrastra.

            Los datos en su contra se acumulan cada mañana, cien mil votantes del PP (8,6%) se fueron a Podemos en las elecciones europeas, uno de cada tres que le apoyaron en el 2011 están arrepentidos, los votantes fieles van siendo minoría, agricultores, autónomos, pequeños empresarios y comerciantes, las antiguas clases medias, pierden en titulados superiores (tienen un 10%), y solo se mantienen en zonas rurales de poca población, mermando en centros urbanos de más de cincuenta mil habitantes. Sus votantes treintañeros se van Ciudadanos, su grueso electoral fijo se queda en mayores de 65 años y comparte con el PSOE los de la cincuentena, jubilados y amas de casa. El hombre joven, urbano, de las nuevas clases medias y con formación votará a Podemos, el bicho del siglo.

        No obstante para el PP, el verdadero enemigo a batir es Ciudadanos, al que se enfrenta armado hasta los dientes bajo el lema, “Hay que desnudar a Albert Rivera”, ya lo hizo él solito en su primer cartel electoral. Ahora, desde el PP pretenden echarle hacia el centro-izquierda y atribuirle carencia de programa económico, le atacarán con argumentos reales o inventados, así son ellos.

            Ideológicamente, los incondicionales del PP votan pensando en defender restricciones de derechos sociales y conseguir o mantener beneficios personales, no en la clave de colectividad e interés general. Muchos de ellos están enfurruñados porque no se han atendido sus expectativas, pero a pesar de estar hundidos hasta el gorro en la corrupción se defienden y excusan con disciplina a sus líderes: “Rajoy debería haber sido un poco más contundente con el caso Bárcenas, pero bueno, es gallego”, y se queda tan ancha la vecina del Barrio de Salamanca.

            El siglo XXI está muy interesante, las redes ganan por la mano en cualquier iniciativa o novedad, y la mitad de los votantes del bipartidismo no están enganchados, ni tan siquiera tienen correo electrónico, el resultado está servido.

«Diario Palentino, 22/022015»

 Zurriagazos al lomo ciudadano


principal-impuestos-el-club-de-los-pringaos-es_med (1)“Los 800 millones de la fianza de Bankia, también los pagamos entre todos”

             Las trampas del lenguaje son cada día más sofisticadas. La caja común, el conocido erario público adónde van a parar nuestros impuestos y los rendimientos de la producción y del patrimonio que son de todos, va sumando nombres, cajas, cajitas, órganos y organillos, con los que llegado el caso pretenden y consiguen despistarnos.

            Veamos el caso Bankia. En origen una caja de ahorros con los privilegios fiscales correspondientes porque repartían dineros en la llamada Obra Social, resultó ser un nido de tejemanejes por parte de políticos y sindicatos para repartirse la buena vida de los consejos de administración y cambalachear en la autoadjudicación de créditos incobrables, dejando miguillas de la obra social para mobiliario de jardín y juegos infantiles en los pueblitos que se conforman con poco y aplauden mucho.

            La Caja Madrid se fue de vareta, se llenó de expolíticos, políticos, sindicalistas con bozal y otros amiguetes que no se denunciaban unos a otros porque todos estaban hasta el cuello, y así, cuántas más uvas comía el ciego, más pillaba el Lazarillo. Aquél avispero de ladrones estalló y sigue, sigue sin parar de arrebatarnos bienestar para tapar el todavía inconmensurable cráter relleno de casi todos los delitos económicos conocidos.

            Lo sorprendente es, que salga el sol por donde quiera, los ladrones institucionales de guante blanco tiene tan bien hechas las leyes que siguen trabajando y sin entrar en la cárcel. El presunto estafador y administrador desleal, Rodrigo Rato, ha sido fichado por grandes bancos y  megaempresas, parece que valorando sus dotes y cualidades de limpiarnos el bolsillo de una u otra manera, y ahí sigue sin inhabilitación preventiva, ni cárcel, ni limitación alguna, solo le falta sacarnos la lengua. Lección de supervivencia, de ser mangante, a lo grande; si robas chuches, a la trena.

           Además del multimillonario rescate de Bankia que nos dejó las cuentas en las cuerdas, ahora tenemos que poner una fianza también millonaria para responder del mal hacer de toda la pirámide de tragadores. Y,  se arrima al mismo lomo, el de los ciudadanos de a pie que sufrimos los recortes. Lo curioso es que lo explican tan ladinamente que parece que lo pagan otros, dicen: el FROB,  BFA, Bankia, el Estado. Esos y muchos más somos nosotros, nos llaman así, pero en realidad somos únicos, los pringaos.

«Diario Palentino, 15/02/2015»