Ultraderecha y ultracatólicos

   ¡Qué miedo! No es broma. Las mujeres debiéramos ponernos en alerta ante lo que se nos viene encima. La Iglesia católica, la de las púrpuras, la misógina, la que en nuestro país encabeza una docena de figuras como los obispos de Alcalá, Burgos, San Sebastián, Valencia y demás herederos de Rouco, que se han erigido en auténticos soldados contra la libertad e igualdad de las mujeres,  peligrosas enemigas a batir. Se refieren a nosotras como lo hacen los talibanes, esos que vemos en Afganistán imponiendo el burka porque son incapaces de contener su lujuria a la vista de los cuerpos femeninos. Esta Iglesia, la retrógrada anti-Papa Francisco, ha encontrado en VOX un brazo político que no va a desperdiciar. Teniendo a su principal valedor en HazteOir (y el Yunque), va sumando a sus huestes docenas de viejos conocidos pertenecientes a los Kikos y el Opus Dei. Menudo cóctel, si se suma el PP no falta un solo elemento para restaurar la Inquisición.

            Veamos, en conjunto, lo que tienen reservado para los ciudadanos en general y las mujeres en particular según los “principios irrenunciables” de la testosterona, a saber: La defensa de la vida: no al aborto ni a la eutanasia, pero mientras están vivos se los puede masacrar arrojando bombas sobre sus tejados, dejándolos ahogar en al océano o morir de hambre después de expoliados. Defensa de la familia normal: padre, madre e hijos, por supuesto la mujer en el hogar familiar, paridora, disponible y sumisa. Las denuncias por violencia machista, son falsas; las casi mil asesinadas en quince años no existieron. La ideología de género denigra a los hombres. Las cuotas en la listas electorales perjudican a los hombres; ya lo creo les quitan puestos. A los del colectivo LGTB, que no les pase nada. Otro día, más.

Diario Palentino, 9 de diciembre de 2018

Persecuciones inquisitoriales

La edad es mental, pero el cuerpo va acusando los años. El envejecimiento y la muerte han constituido una obsesión para la especie humana. Desde los alquimistas, que ya buscaban la fuente de la eterna juventud, pasando por todo tipo de creencias mágicas, hasta los actuales científicos, se van añadiendo pautas para intentar mantenernos más tiempo sanos, activos y despiertos. El tabaco, la mala alimentación y la falta de ejercicio fueron las más señaladas a lo largo del siglo XX. En la actualidad, algunas corrientes pretenden recuperar interesantes aportaciones perseguidas por la medicina oficial que apuntaban a la influencia de la mente y las emociones en muchas enfermedades humanas. Los libros del doctor Sarno, entre otros, debieran imponerse de lectura obligada en las facultades de medicina. Tan duros de mollera somos que nos dejamos engañar por esas empresas farmacéuticas que no nos cuentan el daño irreversible que hacen algunos medicamentos, además de no curar. El gobierno acaba de aprobar medidas contra lo que denomina pseudoterapias, que en realidad son tratamientos complementarios que llevan siglos, a veces milenios funcionando, como la acupuntura. Y, sin embargo nadie ha puesto en tela de juicio la noticia de que una buena relación social, un entorno cálido y armonioso, unos buenos amigos y una familia nutritiva, aumentan la esperanza de vida tanto o más que no fumar, alimentarse bien y hacer ejercicio. ¿En qué quedamos, cuenta o no el estado mental y emocional en la salud? cuerpo sano en mente sana. El efecto placebo está aceptado científicamente. Nadie tiene derecho a matar la confianza de los enfermos, la energía mental es la base. Que persigan a los charlatanes, no se debe meter a todos en la misma cesta.

diario Palentino, 17 de noviembre de 2018

La universidad en la diana

    Los sucesivos escándalos de la Universidad Rey Juan Carlos han puesto en la diana todo el sistema universitario. Hace años lo que daba esplendor a un licenciado era un brillante expediente académico, bastaba con esforzarse más o ser más listo, los planes de estudios eran elaborados por expertos académicos que establecían los programas considerados adecuados para una buena formación, entonces ser profesor universitario otorgaba un prestigio y el honor de ser un maestro orgulloso de crear buenos discípulos. Pero como todo lo demás, la universidad se mercantilizó. Ahora son las empresas las que dictan lo que los alumnos deben saber para ser más productivos. El Plan Bolonia instauró la necesidad de un máster para validad el título. Un máster que sacrifica a las familias y ha facilitado la creación en los campus de “empresas” imbuidas de ánimo de lucro, sobre todo de los gestores y profesores, quienes perciben sobresueldos de escándalo para que aprendan los alumnos lo que en la carrera, normalmente, no se les enseñó. La titulitis, el engrosamiento del curriculum con cursos, cursillos, trabajillos, etc. han hecho crecer este tipo de entes públicos y privados de dudosa eficacia, oscuras cuentas y propensión a las corruptelas. Eso unido a la endogamia con cátedras “hereditarias” y la supravaloración de los “papers”, publicaciones en revistas y medios especializados que dan puntos para ascender u obtener condecoraciones, de modo que muchos profesores entregados a engrosar su propio CV, a hacer relaciones políticas y a colarse en los máster, tragan con todo y, además les molesta dar clase, porque es un latazo aguantar alumnos desinteresados en las explicaciones, como si ellos no tuvieran nada que ver en la desmotivación. Quod natura non dat, Salmantica non praestat.

Diario Palentino, 15 de noviembre de 2018

Un PP acosado y acosador

         La movida independentista catalana fue alentada por Artur Mas y los Puyol para ensombrecer los graves casos de corrupción que habían expoliando los bolsillos de sus ciudadanos. Artur Mas fue quien puso al radical Puigdemon. Al PP de Rajoy le vino al pelo, porque estaban comenzando a juzgar los interminables casos de corrupción de su “organización criminal”, según definición propia del juez instructor. Así que todos a echar leña al fuego como auténticos bomberos pirómanos. Pero ninguno ha salido bien parado. Los separatistas presos, las familias divididas y Barcelona desprestigiada. Al PP no le ha ido mejor, los incontables asuntos judiciales en trámite dan para muchos años de noticias vergonzantes, de modo que hay que alzar la voz y meter mucho ruido. Y quién mejor que un joven ambicioso sin escrúpulos, que idolatra el caudillaje y el patrioterismo, para convertirse en la longa manu de José María Aznar, aquel hombre sin conciencia que nunca pidió perdón por tantas muertes inocentes justificadas con enormes mentiras en sede parlamentaria, aquel gobernante que tiene 12 de sus 14 de sus ministros implicados en corrupción, algunos ya en prisión. El PP está en la cuerda floja porque además le sale Ciudadanos a la par en derechura y Vox más extrema aún, lo que en términos de reparto de votos no le da para gobernar. Qué hacer, lo que hacen los perversos narcisistas, si no ganan rompen la baraja. Es lo que pretende, o las instrucciones que recibe, el hiperactivo Pablo Casado, distorsionar la realidad, atacar al gobierno con discursos barriobajeros que nadie cree y ofender a los españoles mancillando el órgano de representación por excelencia del pueblo con tantas mentiras, y es que quien hace un cesto hace ciento, y mentir a lo grande es su especialidad.

Diario Palentino, 27 de noviembre de 2018

Cuidado con lo que viene. Las tres derechas

Y ya son tres los partidos en distintos niveles de derechización que se disputan el puesto de ser los mejores en xenofobia y misoginia; en suprimir los servicios públicos de salud y educación para que sus amigos hagan negocio en la privada; en menoscabar la seguridad jurídica reduciendo el aparato judicial y que los partidos políticos sean impunes por sus casos de corrupción (VOX); en traficar con el cuerpo de las mujeres para convertirlas en madres de alquiler con total desprecio del interés de las criaturas traídas al mundo por medio de tan despreciable negocio (Ciudadanos); en convertir a los trabajadores en esclavos laborales, un presidente del IBEX ingresa en su cuenta entre cinco y diez millones al año pero incendian las redes con avisos apocalípticos si se aprueban 900 euros de salario mínimo. El líder del PP, en trasnochado discurso colonial e imperialista, se enemista con los 421 millones de sudamericanos cuyos portavoces le han respondido que ellos ya se habían descubierto a sí mismos antes de llegar Colón. En la izquierda, los socialistas luchan denodadamente por defender el bienestar de la mayoría de españoles, a pesar del lodazal que las derechas crean en el camino del gobierno para que se atasquen las ruedas y no pueda avanzar en el peligroso camino de la igualdad, la justicia social, el reparto equitativo de la riqueza producida o la defensa de la integridad física de las mujeres y los menores. En el lado del nacionalismo catalán, hay que ver las sorprendentes mentiras que se cuentan y la ignorancia existente entre los que lo creen. España “nes roba”, véanse Pujoles, Palau, 3%… así hasta 198 mil millones, sí 198 mil millones estimados en 25 casos catalanes. Los pobres niños catalanes chapurrean el idioma de 700 millones de parlantes, pro se les exige conocer a fondo uno que solo les sirve para vivir en su pueblo.

Diario Palentino, 21 de octubre de 2018