Quiero mi casa

            Es la petición habitual en las conversaciones entre jóvenes. No pueden permitirse un alquiler porque sus trabajos están mal pagados y son inseguros. De comprar casa ni hablan. Independizarse en solitario se ha convertido en una idea con la categoría de sueño, como un premio de la lotería, lo habitual es que tengan que compartir vivienda sí o sí, en pareja o con compañeros de piso. Es incomprensible cómo el gobierno no toma medidas ante las cifras del envejecimiento de la población y la falta de relevo generacional, sin nido no hay polluelos y la economía no está para asumir riesgos. En los centros y zonas atractivas de las grandes ciudades el problema es alarmante, para recuperar la vivienda y destinarla al boyante negocio de los alquileres turísticos los propietarios no renuevan el contrato a familias asentadas desde hace años. Hace pocos días el debate se centraba en la propietaria de Barcelona que alquiló, mediante una agencia turística, su propio piso para recuperarlo de un inquilino quién lo realquilaba y quintuplicaba los ingresos en relación con lo que pagaba de renta, si bien es cierto que la tal casera le cobraba novecientos cincuenta euros al mes por treinta metros cuadrados. La misma superficie que ofreció en su día para viviendas juveniles la ministra de vivienda socialista, María Antonia Trujillo, despertando las iras de las Nuevas Generaciones del Partido Popular, ahora tan calladitas a pesar de la precariedad  laboral a que les someten las normas impuestas por sus mayores en el gobierno. En la comunidad de Madrid una nueva regulación espera poner coto a los alquileres turísticos exigiendo que la comunidad de propietarios, por mayoría, otorgue permiso para este tipo de negocios en su inmueble, es un paso, pero añadirá  fricciones en las ya conflictivas relaciones de estas comunidades. Sería precisa una política integral de alquileres adecuada a las necesidades de la población.

«Diario Palentino, 2 de julio de 2017»

La religión y sus sombras

C2017G“Culpa, sangre, sufrimiento, llagas, muerte, Eva pecadora y… el hombre redentor”

             Los mercaderes en el templo exhiben sus productos aliñados con un tétrico teatro representando al completo el mundo de las sombras que habita la mente de los hombres: tortura, sadismo, dolor, violencia, humillación del inocente, condena para las almas buenas y culpa, mucha culpa. Los desfiles de dolor acompañan durante noches y días el trayecto procesional hasta amanecer en un imperceptible resurrección, que es en realidad lo que de verdad cuenta, la vuelta a la vida, al reencuentro con la luz después de purgar las tentaciones del averno, lo que propiamente es redención, redimir el tiempo perdido entre iniquidades. Pero ni la propia Iglesia Católica se emplea ya en darle ese significado. Aposentada en sus mantras recita sus letanías y vía crucis de manera tan mecánica que daría lo mismo dárselo a un lector de voz virtual. Los mensajes integrados a base de repetición han perdido significado para el que lo enuncia y para quienes los reciben. Una rutina que ha encontrado su utilidad crematística, su mina de oro en el turismo, ese oscuro objeto del deseo de todo político y hostelero que se precie. El turismo, última divinidad creada por el dinero, ídolo mágico que enriquece por donde pasa y para el que se crean normas de adoración aún a costa del bienestar de los ciudadanos oriundos obligados a plegarse ante supremo repartidor de euros.

            De Interés Turístico Internacional, título de la Semana Santa palentina lo resume todo y lo invade todo, también. El uso y disfrute de la Plaza Mayor de la ciudad, sede de la municipalidad que representa a todos los palentinos queda minimizado durante días, reservado para actos que solo atañen a una parte de la ciudadanía. Mientras tanto, permanece desierta la Plaza de la Catedral, estupenda ocasión para fomentar entre los visitantes esa Bella Desconocida cuyo sino parece seguir siendo desconocida y ninguneada por los propios gobernantes locales. Las colgaduras, pendones y enseñas de las cofradías en la fachada del Ayuntamiento son, además de una provocación, una intrusión inadmisible del espacio democrático ciudadano en un estado laico, en una sede que representa a todos sin distinción de creencias, como manda nuestra Constitución. Es un consuelo ver que muchos cofrades son también peñistas y viceversa. El gregarismo nos une con diferentes disfraces para la ocasión. 

«Diario Palentino, 16/04/2017»

¡Vaya lío!

216331-lio_cables-big«Expresión actual para referirse a todo en general”

             Vaya lío en el PSOE con tres candidatos que se sabotean hasta límites paranoicos. Vaya lío de corrupción y mangoneo en el PP, que trata de ocultarlo con provocativos homenajes y ascensos. Vaya lío se tienen los catalanes con su independencia. Vaya lío el de los refugiados que nadie quiere y todo el mundo dice compadecer. Vaya lío de absoluciones y condenas que se tienen en la Justicia. Vaya lío el que tenemos todos los habitantes del planeta con las ocurrencias de Donald Trump. Vaya lío el del precario gobierno del PP que más bien es un sin gobierno o un desgobierno. Es lo que se oye constantemente en cada conversación de esquina. La frase que comienza con vaya lío puede acabar con cualquier cosa. Pero lo cierto es que estamos hartos de consumir nuestro tiempo siguiendo las cuitas y los vaivenes de los políticos, eso sí que es un lío. En la confusión, si no sabemos lo que votamos no podremos quejarnos de lo que nos hagan, y si no que se lo pregunten a los ciudadanos USA. Yo no he sido, yo no he sido, como los niños traviesos que hacen la picia, cuando las cosas salen mal nadie depositó del voto que encumbró al gobierno de turno, pero si sale bien levanto el dedo para decir yo. Así nos va.

            Cuando “el lío” provoca grandes males a la democracia, como la Ley mordaza, o a la economía de las familias, como el impuesto al sol, por poner ejemplos, entonces las consecuencias que se dejarán ver a medio y largo y plazo ya no tienen fácil remedio, véanse las escandalosas condenas por tuits y otras simplezas y las también escandalosas absoluciones al latrocinio VIP. Sin embargo, nos tomamos todo con la ligereza de un partido de fútbol, ya todo es baladí, como el consumo, de usar y tirar, y mientras las fuerzas que merman la democracia y el bienestar ciudadano avanzan, los partidos políticos que dicen defenderlos se entregan a enredos internos que llenan titulares y nos distraen de lo que de verdad importa. El alcalde musulmán de Londres dijo hace meses que los ataques terroristas en occidente “son parte de la vida en las grandes ciudades”, ni ha condenado el de esta semana. Así estamos, inmersos en comentarios que recibimos con una levedad pasmosa ante hechos de gravedad preocupante. Adolecemos de falta de conciencia para valorar lo que de verdad ocurre, No dedicamos tiempo a la reflexión. Vaya lío.

«Diario Palentino, 26/03/2017»

Decálogo de un hombre por la igualdad

Ante la violencia los hombres van comprendiendo: “el silencio nos hace cómplices”

          14680764_10154104420318230_7359439658031351357_n La AHIGE, Asociación de Hombres por la Igualdad de Género, tiene como lema “Con la igualdad ganamos todos”. Merece la pena un paseo por esta página donde son hombres hablando del tema desde el prisma de los hombres. Este enfoque procede de movimientos nacidos a principios de los setenta en los países nórdicos y que se han ido extendiendo por los países más democratizados enlazando con las nuevas masculinidades que proponen el cambio en términos de ganancias, sobre todo porque consideran que el machismo es un corsé demasiado rígido y obsoleto que les impide un desarrollo personal satisfactorio. Defienden que librándose de esos esquemas los hombres ganan en libertad de conductas, pueden gestionar con naturalidad su mundo emocional, relacionarse con sinceridad con otros hombres, ganar en autoestima, seguridad, en autonomía personal y funcional; no necesitar de nadie que les atienda ni temer ser abandonados o a estar solos; gozar de una sexualidad más completa y satisfactoria; disfrutar de una paternidad cercana y responsable; vivir unas relaciones de pareja sanas y nutritivas y cambiar la fuerza por la inteligencia emocional libre de las imposiciones del machismo.

          Desde esta filosofía difundida y practicada por grupos de hombres concienciados se elabora un decálogo que identifica al hombre plenamente desarrollado, a saber:

  1. Se acepta a sí mismo como producto de su tiempo y cultura.
  2. Se replantea sus valores, esquemas, mecanismos, conductas y pensamientos.
  3. Mantiene una actitud de cambio en su relación con las mujeres. No tolera la desigualdad por razón del sexo.
  4. Comprende que es necesario que los hombres se posicionen activa y públicamente sobre el tema.
  5. Aprende a verse como un ser sensible, afectivo y vulnerable e intenta superar su tradicional aislamiento emocional.
  6. Quiere una relación más completa con sus hijos e hijas y asume su responsabilidad paternal.
  7. Va superando el miedo y el rechazo ante situaciones de cercanía y complicidad con otros hombres.
  8. Avanza en la renovación de su sexualidad para vivirla de forma más natural y plena.
  9. Cambia su actitud hacia la homosexualidad y analiza su relación personal con este tema.
  10. Y, por supuesto, adopta una actitud de tolerancia cero hacia la violencia de género de los hombres contra las mujeres.                                                                                                              «Diario Palentino, 5 de mayo de 2017»16265548_10154395474048230_3227382029493252315_n

 El humor en redes y la cárcel

9cdd0a6837032951f887320a46837e2aOjo con lo que escribes, la cárcel te espera hambrienta

            El Derecho a la libertad de expresión e información consagrado en el artículo 20 de nuestra Constitución, se consideró como una de las mayores conquistas para los españoles después de la caída de aquél terrorífico régimen franquista. Ahora, con el fin de protegernos contra la difusión y captación del terrorismo, principalmente yihadista, aprobamos una legislación especial que modifica algunos derechos de los presuntos incursos en esas actividades. Hasta ahí todo normal, todos los países que se sienten amenazados han aprobado medidas similares. Lo que no ocurre en esos otros países, es que los tribunales estén aplicando estas medidas excepcionales a los propios ciudadanos y por chistes que son más bien casposos y cutres que peligrosos.

            Y, es que todavía quedan, o se reproducen, jueces que añoran los viejos tiempos de la intolerancia. Así ocurrió con los tuits de Zapata, tres veces causa abierta, tres veces sobreseída. Ahora se ceban con el cantante de Def Con-Dos, la Audiencia nacional lo exculpa y el Tribunal Supremo lo condena por hablar de ETA y del Grapo que ya ni existen. Me piden una pena de 2 años y 6 meses de cárcel más 3 años de libertad vigilada y 8 de inhabilitación absoluta por chistes de Carrero Blanco. Sólo eso, chistes de un dictador, dice la joven Cassandra, aterrada ante la desproporción. Mientras tanto la red se llena de respuestas: Supongo q Billy El Niño nunca ha sido juzgado porque no hizo ningún chiste de Carrero Blanco durante los 9 días q torturó a Lidia Falcón. En España sale más barato ser responsable de la muerte de 62 militares que contar un chiste sobre Carrero Blanco. Etc.

            Amnistía Internacional denuncia: “El caso de Strawberry es un ejemplo de los excesos que se están cometiendo bajo las duras leyes antiterroristas de Europa”. Wall Street Journal titula: La ley antiterrorista española pone a prueba la libertad de expresión. Sin embargo, no se pone en entredicho ni se considera apología de la violencia el que exista y se financie con subvenciones públicas una Fundación Francisco Franco para exaltar la figura del más grande asesino de la Historia de España, que además viola impunemente la Ley de Secretos Oficiales al poseer documentos secretos y mientras el gobierno mantiene que el Valle de los Caídos, construido por esclavos políticos, no es un monumento franquista. 

«Diario Palentino, 22/01/2017»