Carta de María Garzón Molina.

A los que hoy brindarán con champán

Esta carta está dirigida a todos aquellos que hoy brindarán con champán por la inhabilitación de Baltasar Garzón.

A ustedes, que durante años han vertido insultos y mentiras; a ustedes, que por fin hoy han alcanzado su meta, conseguido su trofeo.

A todos ustedes les diré que jamás nos harán bajar la cabeza, que nunca derramaremos una sola lágrima por su culpa. No les daremos ese gusto.

Nos han tocado, pero no hundido; y lejos de hacernos perder la fe en esta sociedad nos han dado más fuerza para seguir luchando por un mundo en el que la Justicia sea auténtica, sin sectarismos, sin estar guiada por envidias; por acuerdos de pasillo.

Una Justicia que respeta a las víctimas, que aplica la ley sin miedo a las represalias. Una Justicia de verdad, en la que me han enseñado a creer desde que nací y que deseo que mi hija, que hoy corretea ajena a todo, conozca y aprenda a querer, a pesar de que ahora haya sido mermada. Un paso atrás que ustedes achacan a Baltasar pero que no es más que el reflejo de su propia condición.

Pero sobre todo, les deseo que este golpe, que ustedes han voceado desde hace años, no se vuelva en contra de nuestra sociedad, por las graves consecuencias que la jurisprudencia sembrada pueda tener.

Ustedes hoy brindarán con champán, pero nosotros lo haremos juntos, cada noche, porque sabemos que mi padre es inocente y que nuestra conciencia SÍ está tranquila.

Madrid, 9 de febrero de 2012

* María Garzón Molina es hija del juez Baltasar Garzón

Mujeres, franquismo y libertades

    El juicio al Juez Garzón está siendo las vergüenza nacional y su eco se prolonga más allá de las fronteras. Las organizaciones de derechos humanos del mundo están señalando con el dedo a la justicia española. Sentar en el banquillo a un Juez por perseguir a los criminales es la última gran decepción sobre el funcionamiento de nuestra democracia y las fuerzas oscuras que la controlan.
Si a ello añadimos que nuevamente se va a tener que debatir en el Parlamento la posibilidad de investigar sobre los asesinatos del franquismo, el horizonte se nubla para las libertades públicas. Con su aplastante mayoría decisoria de nuevo echarán tierra sobre las fosas no excavadas, volverán a financiar las fundaciones para investigaciones halagadoras de aquél Régimen, dejarán morir de inanición las asociaciones, las ediciones y todo lo relacionado con las actividades de la Memoria Histórica para volver a rehacer la propia historia “al gusto”. Para nosotras el parón ya ha comenzado con la crisis en los sistemas de protección ante los malos tratos y no sabemos por donde continuará.
Las mujeres de la Derecha claman y corren a misa cada vez que un gobierno socialista aprueba una ley de igualdad, libertad o protección para las mujeres, pero luego son las primeras en hacer uso y abuso de las posibilidades otorgadas, nunca las han derogado cuando ha tenido ocasión, pero sí se han divorciado, abortado, acogido a las ayudas de discapacidad, familias numerosas, exenciones, etc.

     Es lo bueno de la democracia, que afecta tanto a los que aprueban como a los que se oponen. Aquellos tiempos en los que Ana Botella decía que “una mujer tiene que ser mujer, mujer” (ella sabrá lo que quería decir, o no) pasaron la historia al convertirse en alcaldesa de Madrid con su vara de mando.
Lo que está claro es que las asesinadas o encarceladas con sus hijos durante la Guerra Civil y la Dictadura permanecerán en sus indignos enterramientos y el testimonio de sus vidas en el olvido. Pero además fueron muchas las sufridoras anónimas, nunca suficientemente valoradas, las que lucharon junto a sus hombres, material y moralmente, cerca del frente y en la retaguardia o como encubridoras, las viudas supervivientes de rojos denostados, criando los hijos solas y señaladas en sus ambientes como la peste. Solo podrán recuperar su nombre para una lápida testimonial, o tal vez ni eso. «Periódico CARRIÖN, 2ª quincena, enero 2012»

Carmen Chacón, esa mujer

“Quién mejor para comenzar la reconstrucción de una casa en ruina, que una mujer aún ilusionada, talentosa, joven, discreta y fuerte”
    No necesitamos un nuevo PSOE, basta con respetar su ser intrínseco fundacional, echar a los mercaderes del templo, retomar el mensaje y volver a hacer habitable la casa socialista adecuando la estructura interior y el discurso. Esto solamente se puede llevar a buen término por personas que carezcan de un lastrado y controvertido pasado político y sepan mirar hacia adelante sin rencores, una generación posfelipista.
    Las coplas de otros tiempos están bien para de vez en cuando abrir el libro de la historia y dejarse llevar por un remember puntual, lo mismo ocurre con las voces y los rostros que significan una determinada manera de hacer las cosas que ha llevado al socialismo español a la  más estrepitosa ruina electoral (puede que por la crisis, madre de todas las culpas) pero también interna por la desconfianza creada tanto en las bases de afiliados y adeptos como en la ciudadanía simpatizante. El trío formado por Alfredo Pérez Rubalcaba (ya ministro con Felipe González), Elena Valenciano (política profesional por herencia de su padre, Luis Valenciano, Subsecretario de Sanidad con la UCD) y José Blanco, alias Pepiño (de formación y profesión “político” y ahora con cuestiones sub iúdice), han tejido en la estructura interna del PSOE tal maraña de poderes que controlan todos los resortes y por sus manos pasa toda la información, decisiones, movimientos, etc. Jefes supremos que a base de años de permanencia han olvidado distinguir entre pasado y presente. Sin duda, en su momento fueron destacadas figuras en sus funciones políticas, hoy son pasado y deben apartarse ya para que el partido se oxigene.
     Debemos recuperar el discurso pre crisis del auténtico y creyente Zapatero, comenzar ya a reconocer lo que él aportó de extraordinaria importancia a las libertades públicas, a la situación de las mujeres, de los marginados, de los que menos tienen y más necesitan, a la justicia social, a nuestros mayores y a la cultura en libertad. Todo esto que ya está comenzando a sernos arrebatado por el partido en poder (PP).
      Y quién mejor para comenzar la reconstrucción de una casa en ruina, que una mujer aún ilusionada, talentosa, joven, discreta y fuerte, que ha sabido conciliar su maternidad con su vida pública, que en su Ministerio de Defensa es admirada y querida, que es catalana, andaluza, aragonesa, castellana y ¡qué más da! Española.

      Una valiente que se atreve a enfrentarse al superpoderoso triunvirato y sus adláteres, a sabiendas del campo minado que encontrará en su camino antes de poder sanear el partido y recomenzar una democracia de base. «Diario Palentino, 8 de enero de 2012»      Y «Periódico CARRIÓN, 2ª quincena enero 2012

NOTA: Ante las insinuaciones de algunas personas sobre si «me apunto» a tal o cual grupo, aclaro que: No me considero desleal con nada ni con nadie, ni me interesa ningún «club» porque eso es precisamente lo que nos ha perdido, simplemente aplaudo y apoyo una opción que me parece muy interesante para conseguir el socialismo en el que yo sigo creyendo. No entiendo de bandos, solamente de diversidad de opiniones que incluso pueden ser conversables y compatibles.

Hay Alternativas (Vicenç Navarro, Julián Torres, Alberto Garzón)

Recibo por la Web, el siguiente mensaje cuya divulgación considero de gran interés:

HAY ALTERNATIVAS
Hace un par de meses, la Editorial Aguilar, mostró su interés por  publicar nuestro libro HAY ALTERNATIVAS. Propuestas para crear empleo y bienestar en España, que nos prologó Noam Chomsky.

Cuando ya se había concretado como fecha de publicación el libro el 19  de octubre y se  había comenzado su promoción en la web de Aguilar y en librerías, los editores nos  comunicaron que la empresa deseaba retrasarla sin otra explicación de por medio, lo que  nos obligó lamentablemente a desestimar su publicación en esa editorial. Se confirmaba  así lo difícil que resulta difundir en España, en los  momentos en que son más necesarias  que nunca -como ahora en periodo pre-electoral-, ideas alternativas al pensamiento único  que predomina en el debate político y social.

Para solventar esta situación hemos optado por ofrecer nuestra obra gratuitamente en formato pdf a través de la red y en una nueva edición impresa en Ediciones Sequitur que,  con la colaboración de ATTAC España, se ha arriesgado a publicar rápidamente este libro  que estará  en librerías al precio de 10 euros a partir del 31de octubre.

Tenemos la firme convicción de que solo haciendo que la ciudadanía  sepa lo que de verdad está sucediendo en nuestra economía y divulgando las alternativas que existen a esta aguda crisis del capitalismo podremos salir de ella con más empleo y bienestar social, como demostramos en este libro.

Contra la censura de los grandes oligopolios y el pensamiento único  que imponen los poderes económicos, financieros y mediáticos defendamos la pluralidad y la libertad de  pensamiento conociendo y difundiendo el pensamiento crítico.

Puedes descargar el libro  gratuitamente en:

Web de Vicenç Navarro
Web de Alberto Garzón
Web de ATTAC España
Web de Editorial Sequitur

Nota de IDP: La editorial Aguilar forma parte, junto con Alfaguara,  Altea, El País-Aguilar, Santillana y Taurus, entre otras, del Grupo Santillana, perteneciente, a su vez, al holding PRISA. Los accionistas mayoritarios de PRISA, la familia Polanco (35,016% de las acciones) y, desde mediados del año pasado, un fondo de inversión norteamericano, la Liberty Acquisition Holdings Corp.(57,7% de las acciones). Este  hedge fund agrupa a más de 70 grandes inversores, entre los que figuran GLG, Taurus, Glenhill, Millenium, T Rowe Price, First Eagle,Soros Fund, Fortress, Teachers Advisors, Canada Pension Plan y los bancos Citigroup, Credit Suisse, Deutsche Bank y Morgan Stanley.

La ocultación de alternativas en los falsimedia convencionales es ya más que indignante. La ciudadanía toda tiene que luchar para que algún día se les puedan exigir responsabilidades. El silencio o la manipulación están tratando de tapar estafas, saqueos, asesinatos… Cuando lo que se ocultan son crímenes, el silencio también es criminal. Los medios de desinformación se han convertido hace ya tiempo en cómplices de la  barbarie.

Elogio a la mujer brava

“Estas nuevas mujeres, las mujeres de verdad, las que no se someten y protestan…, que exigen, piden, dan, contradicen y sólo se desnudan si les da la gana” Hector Abad.

En esta ocasión en vez de escribir mi propia abstracción, no puedo resistir la tentación de ceder mi espacio para transcribir una estupenda reflexión del escritor colombiano  Héctor Abad, que circula por la Red y que creo que debe llegar a cualquier lector/a.

“Estas nuevas mujeres, si uno logra amarrar y poner bajo control al burro machista que llevamos dentro, son las mejores parejas”.

A los hombres machistas, que somos como el 96 por ciento de la población masculina, nos molestan las mujeres de carácter áspero, duro, decidido. Tenemos palabras denigrantes para designarlas: arpías, brujas, viejas, traumadas, solteronas, amargadas, marimachas, etc. En realidad les tenemos miedo y no vemos la hora de hacerles pagar muy caro su desafío al poder masculino que hasta hace poco habíamos detentado sin cuestionamientos. A esos machistas incorregibles que somos, machistas ancestrales por cultura y por herencia, nos molestan instintivamente esas fieras que en vez de someterse a nuestra voluntad, atacan y se defienden.

La hembra con la que soñamos, un sueño moldeado por siglos de prepotencia y por genes de bestias (todavía infrahumanos), consiste en una pareja joven y mansa, dulce y sumisa, siempre con una sonrisa de condescendencia en la boca. Una mujer bonita que no discuta, que sea simpática y diga frases amables, que jamás reclame, que abra la boca solamente para ser correcta, elogiar nuestros actos y celebrarnos bobadas. Que use las manos para la caricia, para tener la casa impecable, hacer buenos platos, servir bien los tragos y acomodar las flores en floreros. Este ideal, que las revistas de moda nos confirman, puede identificarse con una especie de modelito de las que salen por televisión, al final de los noticieros, siempre a un milímetro de quedar en bola, con curvas increíbles (te mandan besos y abrazos, aunque no te conozcan), siempre a tu entera disposición, en apariencia como si nos dijeran “no más usted me avisa y yo le abro las piernas”, siempre como dispuestas a un vertiginoso desahogo de líquidos seminales, entre gritos ridículos del hombre (no de ellas, que requieren más tiempo y se quedan a medias).

A los machistas jóvenes y viejos nos ponen en jaque estas nuevas mujeres, las mujeres de verdad, las que no se someten y protestan y por eso seguimos soñando, más bien, con jovencitas perfectas que lo den fácil y no pongan problema.

Porque estas mujeres nuevas exigen, piden, dan, se meten, regañan, contradicen, hablan y sólo se desnudan si les da la gana. Estas mujeres nuevas no se dejan dar órdenes, ni podemos dejarlas plantadas, o tiradas, o arrinconadas, en silencio y de ser posible en roles subordinados y en puestos subalternos. Las mujeres nuevas estudian más, saben más, tienen más disciplina, más iniciativa y quizá por eso mismo les queda más difícil conseguir pareja, pues todos los machistas les tememos.

Pero estas nuevas mujeres, si uno logra amarrar y poner bajo control al burro machista que llevamos dentro, son las mejores parejas. Ni siquiera tenemos que mantenerlas, pues ellas no lo permitirían porque saben que ese fue siempre el origen de nuestro dominio. Ellas ya no se dejan mantener, que es otra manera de comprarlas, porque saben que ahí –y en la fuerza bruta– ha radicado el poder de nosotros los machos durante milenios. Si las llegamos a conocer, si logramos soportar que nos corrijan, que nos refuten las ideas, nos señalen los errores que no queremos ver y nos desinflen la vanidad a punta de alfileres, nos daremos cuenta de que esa nueva paridad es agradable, porque vuelve posible una relación entre iguales, en la que nadie manda ni es mandado.

Como trabajan tanto como nosotros (o más) entonces ellas también se declaran hartas por la noche y de mal humor, y lo más grave, sin ganas de cocinar. Al principio nos dará rabia, ya no las veremos tan buenas y abnegadas como nuestras santas madres, pero son mejores, precisamente porque son menos santas (las santas santifican) y tienen todo el derecho de no serlo.

Envejecen, como nosotros, y ya no tienen piel ni senos de veinteañeras (mirémonos el pecho también nosotros y los pies, las mejillas, los poquísimos pelos), las hormonas les dan ciclos de euforia y mal genio, pero son sabias para vivir y para amar y si alguna vez en la vida se necesita un consejo sensato (se necesita siempre, a diario), o una estrategia útil en el trabajo, o una maniobra acertada para ser más felices, ellas te lo darán, no las peladitas de piel y tetas perfectas, aunque estas sean la delicia con la que soñamos, un sueño que cuando se realiza ya ni sabemos qué hacer con todo eso.

Los varones machistas, somos animalitos todavía y es inútil pedir que dejemos de mirar a las muchachitas perfectas. Los ojos se nos van tras ellas, tras las curvas, porque llevamos por dentro un programa tozudo que hacia allá nos impulsa, como autómatas. Pero si logramos usar también esa herencia reciente, el córtex cerebral, si somos más sensatos y racionales, si nos volvemos más humanos y menos primitivos, nos daremos cuenta de que esas mujeres nuevas, esas mujeres bravas que exigen, trabajan, producen, joden y protestan, son las más desafiantes y por eso mismo las más estimulantes, las más entretenidas, las únicas con quienes se puede establecer una relación duradera, porque está basada en algo más que en abracitos y besos, o en coitos precipitados seguidos de tristeza. Esas mujeres nos dan ideas, amistad, pasiones y curiosidad por lo que vale la pena, sed de vida larga y de conocimiento.

¡Vamos hombres, por esas mujeres bravas!

Oro por que mis dos hijas sean de este maravilloso grupo y encuentren hombres que sepan apreciar a esta clase de nuevas mujeres”

HÉCTOR ABAD

«Periódico CARRIÓN, 31 de octubre de 2011»