Lo oculto, más accesible

Domingo, 17 de Julio de 2011

Lo oculto, más accesible 

El palentino Rubén Infante Docio diseña junto con un abulense ‘La Cara Oculta’, el segundo juego móvil para usuarios ciegos

A. Acitores

Supongo que así se sentirá un jugador de la Wii». A veces, las cosas cotidianas, incluso las más nimias, pueden convertirse en excepcionales para un invidente.

Fue Agustín Ledesma, el director de la ONCE de Salamanca, quien pronunció esta reflexión en voz alta el pasado miércoles, durante la presentación del juego para teléfonos móviles La Cara Oculta, creado por el palentino Rubén Infante y el abulense Ángel Grande. Se trata del segundo videojuego móvil creado para ser utilizado también por personas ciegas y su prototipo para el Windows Phone 7 ha sido desarrollado en el seno del Club de Innovación de la Universidad Pontificia de Salamanca.

Rubén Infante, de 22 años, lleva toda la semana liado, concediendo entrevistas sin parar y explicando por qué este juego de misterio, en el que un detective tiene que ir resolviendo una serie de crímenes cometidos en la ciudad, ha tenido un éxito tan rotundo, antes incluso de ser presentado a la sociedad.

La razón fundamental es sencilla: tiene en cuenta a los jugadores con discapacidad visual. «Siempre se piensa en conseguir que los discapacitados puedan moverse o realizar tareas rutinarias -indica Rubén-, sin embargo, nosotros pensamos que divertirse también es una faceta imprescindible de la vida y que tienen el mismo derecho al ocio que cualquier otra persona, además, sin requerir dispositivos o programas especiales para ellos».

La Cara Oculta utiliza todos los recursos que ofrece el Windows Phone para guiar al jugador por las distintas intrigas, como la vibración o el acelerómetro. « Por ejemplo, orientamos al usuario para que, a medida que el teléfono modifica la intensidad de vibración, sepa si está más o menos cerca del objeto buscado», explica Rubén.

Estos recursos se combinan con las indicaciones de voz, que señalan «cómo debe posicionarse el teléfono y, según la velocidad del jugador en seguir las órdenes, se supera la prueba o no. Y mediante la pantalla táctil, con gestos naturales, podemos coger, soltar, abrir o interactuar con los diversos objetos con los que se encuentra el protagonista». Son estos recursos los que hacen el juego aún más interesante para los usuarios invidentes. De hecho, durante la presentación del miércoles demostraron superar las pruebas, incluso, con más facilidad que los usuarios con el sentido de la vista intacto.

La próxima fase de desarrollo del proyecto, que comenzó a gestarse en febrero, consistirá en pulir los pequeños detalles e intentar exportarlo a otras plataformas, como Android o iPhone «para que más gente pueda acceder a él», señala el informático palentino, que tiene intención, además, de desarrollar el juego para que utilice más capacidades de estos teléfonos, como la brújula digital o el sensor de proximidad. De momento, a Rubén y Ángel no les inquieta en exceso buscar la rentabilidad económica del juego. «Nuestra motivación es la ayuda social que plantea el proyecto, aunque el apoyo de alguna empresa sería beneficioso».

 

PRÓXIMO PROYECTO. Para Rubén Infante, que desarrolló su primera página web con tan sólo doce años, la Informática es una vocación y una fuente de ideas constante.
Ya está trabajando en su siguiente proyecto, una aplicación llamada Escuchaya, desarrollada en la tecnología Silverlight de Microsoft, que permite escuchar música online de manera gratuita y sin necesidad de descargas. «Tengo intención de subirla al marketplace este verano», anuncia. «Diario Palentino, domingo 17 de julio de 2011»

Lo oculto, más accesible

Domingo, 17 de Julio de 2011

Lo oculto, más accesible 

El palentino Rubén Infante Docio diseña junto con un abulense ‘La Cara Oculta’, el segundo juego móvil para usuarios ciegos

A. Acitores

Supongo que así se sentirá un jugador de la Wii». A veces, las cosas cotidianas, incluso las más nimias, pueden convertirse en excepcionales para un invidente.

Fue Agustín Ledesma, el director de la ONCE de Salamanca, quien pronunció esta reflexión en voz alta el pasado miércoles, durante la presentación del juego para teléfonos móviles La Cara Oculta, creado por el palentino Rubén Infante y el abulense Ángel Grande. Se trata del segundo videojuego móvil creado para ser utilizado también por personas ciegas y su prototipo para el Windows Phone 7 ha sido desarrollado en el seno del Club de Innovación de la Universidad Pontificia de Salamanca.

Rubén Infante, de 22 años, lleva toda la semana liado, concediendo entrevistas sin parar y explicando por qué este juego de misterio, en el que un detective tiene que ir resolviendo una serie de crímenes cometidos en la ciudad, ha tenido un éxito tan rotundo, antes incluso de ser presentado a la sociedad.

La razón fundamental es sencilla: tiene en cuenta a los jugadores con discapacidad visual. «Siempre se piensa en conseguir que los discapacitados puedan moverse o realizar tareas rutinarias -indica Rubén-, sin embargo, nosotros pensamos que divertirse también es una faceta imprescindible de la vida y que tienen el mismo derecho al ocio que cualquier otra persona, además, sin requerir dispositivos o programas especiales para ellos».

La Cara Oculta utiliza todos los recursos que ofrece el Windows Phone para guiar al jugador por las distintas intrigas, como la vibración o el acelerómetro. « Por ejemplo, orientamos al usuario para que, a medida que el teléfono modifica la intensidad de vibración, sepa si está más o menos cerca del objeto buscado», explica Rubén.

Estos recursos se combinan con las indicaciones de voz, que señalan «cómo debe posicionarse el teléfono y, según la velocidad del jugador en seguir las órdenes, se supera la prueba o no. Y mediante la pantalla táctil, con gestos naturales, podemos coger, soltar, abrir o interactuar con los diversos objetos con los que se encuentra el protagonista». Son estos recursos los que hacen el juego aún más interesante para los usuarios invidentes. De hecho, durante la presentación del miércoles demostraron superar las pruebas, incluso, con más facilidad que los usuarios con el sentido de la vista intacto.

La próxima fase de desarrollo del proyecto, que comenzó a gestarse en febrero, consistirá en pulir los pequeños detalles e intentar exportarlo a otras plataformas, como Android o iPhone «para que más gente pueda acceder a él», señala el informático palentino, que tiene intención, además, de desarrollar el juego para que utilice más capacidades de estos teléfonos, como la brújula digital o el sensor de proximidad. De momento, a Rubén y Ángel no les inquieta en exceso buscar la rentabilidad económica del juego. «Nuestra motivación es la ayuda social que plantea el proyecto, aunque el apoyo de alguna empresa sería beneficioso».

 

PRÓXIMO PROYECTO. Para Rubén Infante, que desarrolló su primera página web con tan sólo doce años, la Informática es una vocación y una fuente de ideas constante.
Ya está trabajando en su siguiente proyecto, una aplicación llamada Escuchaya, desarrollada en la tecnología Silverlight de Microsoft, que permite escuchar música online de manera gratuita y sin necesidad de descargas. «Tengo intención de subirla al marketplace este verano», anuncia. «Diario Palentino, domingo 17 de julio de 2011»

PRUEBAS DE “STRESS”

No estaría demás aplicar estos controles a los partidos políticos, mejoraría mucho la calidad de nuestra clase política

Como dice la máxima que nunca te acostarás sin saber una cosa más, los comunicadores del mundo financiero son quienes han tomado el protagonismo pedagógico de enseñarnos nuevos vocablos o nuevas aplicaciones a términos ya existentes, y en algunos casos inexistentes, para explicarnos lo mal que está el mundo de la economía y de las finanzas.

“Test de stress”, que en nuestro rico y expresivo idioma equivale a “pruebas de fuerza o de resistencia”, han existido siempre, desde los principios de la mecánica más elemental. Una cuerda se rompe cuando ya no soporta más peso, así de sencillo.

Se vienen aplicando en el campo de la salud para determinar el límite irrebasable de la tensión que pueden soportar nuestros órganos en circunstancias extremas, en el deporte para calificar la fuerza muscular límite de los competidores, se utilizan en la campo de la aplicaciones informáticas para comprobar sus posibles respuestas, en edificación para demostrar cómo se comportarían los materiales empleados en circunstancias extremas sobrevenidas, hasta en educación para evidenciar la capacidad de reacción cognitiva de los alumnos y evaluar la didáctica de los programas.

En sí no son más que laboratorios experimentales, campos de pruebas creados artificialmente, simulaciones bajo unas circunstancias forzadas o inventadas en las que se somete al sujeto o al objeto a sobrevivir o resistir en un medio forzado y poder medir así sus capacidades extremas.

Durante los últimos días y ante la necesidad de ir poco a poco despejando claros que nos permitan  dilucidar facetas de esta compleja crisis (económica, financiera, social, de valores, de solidaridad, etc.) escuchamos los resultados que estas comprobaciones otorgan a los bancos y cajas, de modo que unos aprobarían y otro no al tener que enfrentarse a un deterioro imaginariamente mayor de la economía y sus consecuencias (paro, impagos, devaluaciones inmobiliarias, etc.), es decir en previsión de… lo que no se sabe que puede pasar cuando algo se mueva y vayamos saliendo de esta situación de impás que es como el tapiz de Penélope que un día teje y otro desteje.

No estaría demás aplicar estos controles a los partidos políticos y sus representantes con el fin de valorar sus capacidades de acción y reacción ante eventos inesperados de cualquier naturaleza, eso mejoraría mucho la calidad de nuestra clase política. «Diario Palentino, 17 de julio de 2011»

 

 

Rubén Infante Docio en el Norte de Castilla

El Norte de Castilla Noticias Castilla y León .12.07.11 RICARDO S. RICO | PALENCIA.

Un palentino idea el segundo videojuego del mundo para invidentes en el móvil

La aplicación trata de un detective que debe resolver un crimen y usa el audio, el acelerómetro y la vibración para guiarse.

El ordenador era amigo suyo a los 3 años, cuando las piernas le colgaban de la silla. Y con 12 era todo un ‘hacker’, con su primo como conejillo de Indias. «Nos enfadamos chateando por el Messenger y le mandé un archivo con un troyano, un virus. Cuando lo abrió, tomé el control remoto de su ordenador y se lo apagué», comenta jocoso Rubén Infante Docio, un joven palentino de 22 años estudiante de Ingeniería Informática que, con su compañero de clase en la Universidad Pontificia de Salamanca Ángel Grande, joven abulense de 23 años, ha ideado el segundo videojuego del mundo para invidentes en telefonía móvil.

«El que hay es un buscaminas para el iPhone, que lo ha ideado un invidente», señala Infante, uno de los cuarenta alumnos del Club de Innovación de la Pontificia que intentan desarrollar «cosas nuevas dentro de la tecnología». Windows Phone es el sistema operativo de Microsoft para teléfonos móviles, y la ayuda prestada por la compañía a estos dos jóvenes ha hecho que se decanten por esa plataforma para desarrollar su idea.

«En la Universidad hicimos un curso sobre el desarrollo de esta plataforma, Microsoft vino y nos invitó a ir a Madrid con todos los gastos pagados para enseñarnos», apostilla Infante, que insiste en esa mano tendida por Microsoft como una razón de que el videojuego se desarrolle para Windows Phone, competidor del iPhone, de Apple, y de Android, de Google.

¿Y en qué consiste el videojuego de móvil para invidentes creado por Rubén Infante y Ángel Grande, que se titula ‘La cara oculta’ y que se presenta mañana junto al resto de proyectos del club?

El palentino lo explica de manera pormenorizada. «En el Club de Innovación estamos en la rama de discapacidad y siempre se crean dispositivos especiales para las personas discapacitadas. A ellas no les gusta, quieren sentirse como personas normales y por eso hemos creado un juego para gente con y sin discapacidad.

Va sobre un detective, Ernesto Rivalta, con muy mala leche, algo que se aprecia bien en el juego, al que le surge el caso de un crimen y tiene que averiguar el culpable. Tiene que ir pasando pruebas de conducción, de búsqueda de pistas, y ahora, con las TIC, hemos usado sensores de los teléfonos como las vibraciones o el acelerómetro, así como la pantalla táctil o el audio, para que puedan jugar invidentes», afirma Infante, que pone ejemplos del juego. «Para buscar objetos en la pantalla, si vibra poco es que están lejos, y si vibra más, es que van acercándose.

Para la prueba de conducción, la voz indica izquierda o derecha para girar rápido el móvil, y si lo haces rápido, pasas la prueba. En otra de las pantallas, Ernesto Rivalta se duerme y le dejan una nota, la voz le dice que utilice los dedos y los una para coger la nota», especifica Rubén Infante, que ha prestado su rostro al detective del juego. «Las imágenes son fotos de nuestras casas, de una habitación, de la cocina… Se pasan a blanco y negro, se retocan luego con el Photoshop y quedan bien, al estilo de ‘Sin City’», agrega Infante, que insiste en cómo el videojuego «es el mismo para el usuario, sea o no ciego, y para una persona sin discapacidad también es entretenido».

«El videojuego es el proyecto de fin de carrera y tenemos el verano para que quede perfecto, estamos pensando en meter subtítulos para personas sordas y usar, por ejemplo, la brújula, que los Windows Phone la tienen, para otras pruebas», hace hincapié el joven palentino, que, en principio, piensa en la distribución gratuita del juego.

«Microsoft gana una aplicación más para su ‘Marketplace’, para su tienda de aplicaciones, y nosotros lo registramos como autores. Lo que queremos es su máxima difusión, porque los móviles son el futuro. Los ordenadores dejarán de existir», concluye Infante.

Una madre-palentina orgullosa – Yo // (Rubén Infante Docio)

Castilla y León

Líder mundial en español. Lunes 11/07/2011. Actualizado 17:53h.Edición España

anapixelInnovadores | Salamanca José Manuel Blanco

Primer videojuego policiaco para invidentes en el

teléfono móvil

Rubén Infante y Ángel Grande son los creadores de ?La cara oculta?, thriller policiaco válido para ser disfrutado por todo tipo de público pero adaptado para invidentes a través del teléfono móvil de Windows Phone 7. | Foto: Enrique Carrascal 

Rubén Infante (Docio) (Izda.) y Ángel Grande son los creadores de  «La cara oculta», thriller policiaco válido para ser disfrutado por todo tipo de público pero adaptado para invidentes a través del teléfono móvil de Windows Phone 7. | Foto: Enrique Carrascal

  • Dos estudiantes del Club de Innovación de la Pontificia crean ‘La cara oculta’
  • Sirve para personas con y sin discapacidad y guía por vibraciones y voz

Hace poco más de un año Microsoft lanzaba al mercado Windows Phone, su sistema operativo para teléfonos móviles. Con él pretendía plantar cara al iPhone de Apple y a Android, de Google. Unas semanas después de su aparición en el mercado, dos jóvenes informáticos de la Universidad Pontificia de Salamanca, Ángel Grande y Rubén Infante (Docio), apostaron por crear un videojuego sobre esa plataforma tecnológica dentro del Club de Innovación. Su idea podría haber sido una más dentro del Marketplace de Microsoft, pero ellos se marcaron el reto de crear un ‘audiojuego’ para invidentes, La cara oculta.

A principios de curso, al salir la convocatoria del Club de Innovación, estos dos alumnos decidieron crear un juego para personas con discapacidad visual porque «en el mercado hay muchos juegos, pero sólo unos pocos pueden ser disfrutados por personas ciegas». «Vimos que era una oportunidad para hacer algo diferente y con un carácter social»…

En realidad, ellos sólo han encontrado «unos 40 juegos para personas invidentes en ordenador y sólo el famoso buscaminas para teléfonos móviles», comenta Rubén Infante (Docio). Así que, juntos, decidieron crear una aventura gráfica de misterio, intriga y mucha tensión, basada en un detective «con malas pulgas pero muy inteligente, que tiene que ir descubriendo varias pistas». La trama, ideada por Rodrigo Parrón Yuste, se inicia de forma sencilla pero capítulo a capítulo se va enredando hasta llegar al asesinato.

«La idea era hacer un juego adaptado. Lo novedoso es que está diseñado para que pueda ser disfrutado tanto por personas sin problemas de visión como por discapacitados. El juego es el mismo para los dos, lo que cambia es la forma de usar los mandos», comenta Ángel.

Rubén recuerda que los teléfonos móviles de gama alta tienen «varios sensores, como el acelerómetro, que sirven para controlar el movimiento». «Por audio podemos decirle a la persona invidente lo que tiene que hacer. Por ejemplo, le podemos decir que gire a la izquierda y dependiendo de la rapidez o no, pasa de prueba. Otra forma de guiarlo es con vibraciones, así podemos indicarle que busque un determinado punto en la pantalla y según se acerque, vibrará más o menos». En el caso de las personas sin problemas de visibilidad, el juego le narra los pasos de forma simultánea a lo que se ve en la pantalla.

De momento, el videojuego, que se presentará en sociedad este miércoles junto al resto de proyectos del Club de Innovación de la Universidad Pontificia, se encuentra diseñado para teléfonos con Windows pero estos dos jóvenes innovadores no descartan adaptarlo a las otras dos plataformas del mercado, Apple y Android.

Lo testará la ONCE


A partir del próximo miércoles, La cara oculta será testado en el Centro de Investigación, Desarrollo y Aplicación Tiflotécnica -CIDAT- de la ONCE. También está previsto iniciar los pasos para colocarlo en el Marketplace de Microsoft.

«Nuestro objetivo es subirlo al Marketplace para que se lo descarguen multitud de personas y lo puedan usar. Y, si tiene éxito, podemos seguir desarrollándolo porque la historia del detective tiene un final abierto, termina resolviendo un caso, pero se le pueden añadir más», explica Infante… » Socialmente esta muy bien y abres un mercado que ahora mismo no existe».

Por otra parte, destaca que «ahora mismo, en el Marketplace de Microsoft hay muchos juegos pero aventuras gráficas hay muy pocas. Es otro mercado por explotar porque la competencia es escasa». Un detalle que lo convierte en un videojuego atractivo para las personas sin discapacidad.

Al mismo tiempo, no descartan ampliarlo con subtítulos. «No hay ninguno con ellos, y si los ponemos, estaremos dando opción a las personas sordas de jugar a La cara oculta. En las películas se suelen poner pero en los videojuegos no», comentan.